V I C H A D A .... Sí Aprende

Seneca Lucio Anneo

La Apocolocintosis es una sátira menipea: combina prosa y verso, utiliza un lenguaje en ocasiones vulgar, otras culto y erudito, plagado de palabras, expresiones y citas griegas, prodigadas a la menor oportunidad, hace objeto de sus burlas a los historiadores, a los poetas, a los actores de comedia... una ridiculización universal de la que no se salvan ni los dioses pero que tiene como objeto principal al emperador Claudio. Tamaño: 507 Kb, Narrativa, Satírica-Humor
EPÍSTOLAS ESCOGIDAS (ED. DE DASSO SALDÍVAR) Este es uno de los libros más celebrados de Séneca sus sabios consejos tienen una validez que traspasa las fronteras del tiempo. Sin duda alguna, muchas de las observaciones y conclusiones que contienen estas cartas podrían aplicarse a las inquietudes del mundo actual, tan perturbado por espinosos problemas y trágicas discordias. Lucio Anneo Séneca escribió las más bellas máximas de pureza de la vida, en estas epístolas se aunaban todas las sublimidades del pensamiento humano, la elevación del espíritu y el entusiasmo por la virtud. Las Cartas a Lucilio recogen el fruto de una larga experiencia y contienen las reflexiones más profundas sobre las contradicciones de la condición humana. Tamaño: 838 Kb, Narrativa, Epistolar
Estas Cartas filosóficas son una amplia selección de las Epístolas morales a Lucilio, que reúnen en sus veinte libros ciento veinticuatro cartas que Lucio Anneo Séneca (4 a. C. - 65 d. C.) dirigió a su joven amigo y discípulo Lucilio, que era procurador imperial en la provincia de Sicilia en aquellos años finales de la vida de Séneca en que se escribieron. Las epístolas son de contenido filosófico y filiación estoica y en gran parte están presentadas como las respuestas del maestro a problemas de orden teórico o práctico (de pensamiento o de conducta) que le habría planteado su joven amigo. En ellas se encierra, de un modo aparentemente asistemático pero en realidad muy coherente, la peculiar versión del estoicismo que es la filosofía de Séneca. Estas Cartas filosóficas constituyen un texto muy romano, no sólo por la frecuente referencia a aspectos de la vida del autor y del destinatario (viajes, costumbres, personajes, historias, tradiciones, etc.), sino por la seriedad moral y el sentido de la responsabilidad social del sapiens que en ellas se dibuja y por las citas literarias que esmaltan el texto. Séneca reduce a límites exiguos problemas morales, creando así una especie de ensayos y de asedios de temas de importancia excepcional en la historia del pensamiento. Tamaño: 1.167 Kb, Filosofía, Varios
Aún no hallamos una reseña para este libro Tamaño: 6 Kb, Narrativa, Relatos Cortos y Cuentos
Helvia Paulina, madre de Séneca, muere relativamente joven, por lo que el pequeño Lucio fue adoptado por su tía, quien se lo llevó a Roma para estudiar retórica y filosofía, aunque pronto abandonó la filosofía para centrarse en la retórica, interesándose por el derecho y oficiando de abogado. Séneca fue un gran orador y de amplia cultura clásica, sabiendo reconocer que la base de su aprendizaje fue su madre, quien le inculcó el cariño hacia el estudio. Prueba de ello se recoge en su libro `Consolación a Helvia`, donde plasma con cierta amargura la ausencia de su madre durante su vida en Roma. Esta obra fue escrita en su exilio y es el diálogo más delicioso y lleno de detalles personales. Tamaño: 121 Kb, Filosofía, Sistemas Filosóficos, Greco-Romano
La obra fue escrita para una mujer conocida suya llamada Marcia, quien, según parece, mantuvo el luto por la muerte de su hijo durante más de tres años. En ella, Séneca desgrana uno de los ejes centrales de su filosofía estoica, a saber, el reconocer e incluso esperar la muerte como algo natural e inevitable que puede sobrevenirnos en cualquier momento, algo que al lector moderno puede resultar un tanto ecléctico frente a las posturas más vitalistas que al respecto suelen adoptarse en la actualidad. Sin embargo, algunos aspectos de la obra, sobre todo el que trata con la inmortalidad del alma, son tan semejantes a los propugnados por el cristianismo que llevaron a muchos pensadores cristianos como a Tertuliano o a San Jerónimo a considerar la filosofía de Séneca, y a él mismo, como `saepe noster`, esto es, a menudo, uno de los nuestros. En la obra, además, Séneca compara dos modelos de llanto maternal: el de Octavia la Menor, hija de Augusto, quien, al perder a su hijo Marcelo a los 20 años, `no puso freno a sus llantos y gemidos`, con el de Livia, esposa de Augusto, que al perder a su hijo Druso, `tan pronto como lo puso en la tumba, enterró junto con su hijo toda su pena, y lamentó su pérdida no más de lo que respetaba al César o era justa con Tiberio, viendo que ambos estaban vivos`. Séneca admira el temple de Livia, pues `si te aplicas a imitar a la magnánima Livia, más moderada y tranquila en su dolor, no te dejarás consumir en los tormentos`. Tamaño: 86 Kb, Filosofía, Sistemas Filosóficos, Greco-Romano
El pensamiento de Lucio Anneo Séneca, el máximo representante del estoicismo romano, invita a sobrellevar la vida sin temor. Séneca sostuvo que una vida lograda es aquella que se asienta sobre la razón iluminada por la verdad, que es, indefectiblemente, una vida tranquila, estable, libre, pacífica y magnánima. Mantuvo que los males sólo lo son para la persona que no puede sobrellevarlos bien, y que el hombre bueno se curte sufriendo lo que para otros sería un mal, se entrena venciendo las adversidades y se perfecciona subyugándolas, preparando su espíritu en recio combate con ellas. Un hombre así sabe ofrecerse al destino. Las heridas del alma, y más aún las que un alma brinda a ser nuevamente desgarradas, son la prueba de su valor. A tal efecto, Séneca compuso unos textos para calmar las penas de las almas de Marcia, de su madre Helvia, de Polibio y de Apocolocyntosis. Tamaño: 4.775 Kb, Literatura, Clásica
Lucio Anneo SÉNECA - Cuestiones naturales. Tanto como se diferencia la filosofía de las demás artes, óptimo Lucilio, otra tanta diferencia encuentro yo en la filosofía misma, entre la parte que se ocupa del hombre y la que se refiere a los dioses. Más elevada y atrevida ésta, se ha permitido mucho: no contentándose con lo que se ofrece a nuestra vista, sospechó que la naturaleza había colocado más allá de lo que se ve algo más grande y más bello. En una palabra, entre una y otra filosofía media tanto como entre Dios y el hombre. Enseña la primera lo que debe hacerse en la tierra, la segunda, lo que se hace en el cielo. Una desvanece nuestros errores y trae la luz que ilumina los engañosos caminos de la vida, la otra se eleva sobre esta densa niebla en que nos agitamos, y sacándonos de la oscuridad, nos lleva al manantial de la luz. Gracias doy en verdad a la naturaleza cuando, no contento con su parte pública, penetro hasta en sus misterios más secretos, cuando aprendo de qué elementos se compone el universo, quién es el arquitecto o conservador, qué es Dios, si está absorto en su propia contemplación, o si algunas veces inclina hasta nosotros sus miradas, si crea diariamente, o ha creado una vez sola, si forma parte del mundo o es el mundo mismo, si todavía hoy puede dar nuevos decretos y modificar las leyes del destino, o si le es imposible retocar su obra sin descender de su majestad y reconocer que se ha engañado: necesario es sin duda que ame siempre las mismas cosas aquel que solamente puede amar las perfectas, no siendo por esto menos libre ni menos poderoso, porque él mismo es su necesidad. Si no pudiese elevarme a todo esto, para nada habría nacido. Tamaño: 155 Kb, Filosofía, Sistemas Filosóficos, Greco-Romano
Texto revisado y traducido por Carmen Codoñer Merino. Uno de los puntos que recibe especial atención en las ediciones y estudios sobre las Naturales Quaestiones, es el carácter científico de la obra. No se concede tanta importancia, sin embargo, a la naturaleza literaria de la misma. Es mi intención ver la posibilidad de poner en relación ambos factores, a pesar de la aparente incongruencia. Esta obra de Séneca suele relacionarse con la correspondiente Historia Naturalis de Plinio, aunque de modo aparentemente inexplicable Plinio siempre recibe un lugar en las Historias sobre la Ciencia Antigua y Séneca no. El primer hecho es posible que se deba a la semejanza de título: De naturalibus quaestionibus e Historia Naturalis coinciden en uno de los elementos léxicos, en el segundo caso, la cuestión es bastante más complicada. Existe, desde luego, una razón evidente: la cantidad de datos que nos proporciona Plinio, cuya obra parece tener carácter de archivo, frente a la escasez de ellos en Séneca, que da a su tratado una apariencia de diálogo tradicional en ocasiones. De todos modos, el carácter científico de una obra admite dos posibilidades de enjuiciamiento: su aportación objetiva al desarrollo de la ciencia, y su significación para el propio mundo en que ha sido elaborada. Del estudio de este último —hasta ahora no muy tratado— puede deducirse cuál es la concepción`que de la ciencia tenía el mundo romano y si dentro de ella se establecían esas afinidades que actualmente establecemos entre tratados aparentemente similares. Nos encontramos, en primer lugar, con una diferencia significativa entre los títulos de las obras de Séneca y de Plinio: Séneca al introducir el término quaestiones se sitúa en un plano distinto al de la Historia pliniana. El primero comporta la discusión, el contraste de pareceres del que puede obtenerse una luz, el segundo, simplemente la exposición discriminada o indiscriminada de hechos o dichos. Por otro lado, la convicción del propio Plinio acerca de la originalidad de su obra y su carácter enciclopédico es otro síntoma de que ese campo no se consideraba todavía cultivado: nemo apud nos qui idem temptauerit inuenitur, nemo apud Graecos qui unus omnia ea tractauerit. magna pars studiorum amoenitates quaerimus... ante omnia attingenda quae Graeciuocant. Hay que añadir que la mención que en ese mismo pasaje hace Plinio del carácter leuis de su obra —aun aceptando la posible influencia que en tal denominación haya podido ejercer el hecho de encontrarse en la dedicatoria— nos lleva en dirección contraria a Séneca. Tamaño: 8.630 Kb, Filosofía, Sistemas Filosóficos, Greco-Romano
«¿Qué va a pasar?» -escribe Séneca-, «tú no tienes tiempo para nada y la vida corre, entretanto llega la muerte y para ella, quieras o no quieras, vas a tener todo el tiempo del mundo». Estas palabras dan una idea de la intensidad y de la desgarradora sinceridad con la que se expresa el filósofo cordobés en Sobre la brevedad de la vida. Compuesto en torno al año 55, este tratado constituye uno de los textos más sobrecogedoramente honestos escritos nunca sobre el paso del tiempo, sobre la muerte y, por extensión, sobre la vida. A pesar de que los hombres no paran de quejarse de la brevedad de la vida, el tiempo del que disponen es bastante si se sabe aprovechar. Desperdiciamos el tiempo y no lo consideramos el bien mayor y único. La solución que propone Séneca no pasa por la hiperactividad ni por la holganza, sino por una serena aceptación de la propia mortalidad que nos permita administrar positivamente el espacio clausurado de la propia existencia. La voz del viejo sabio, volcada aquí en una nueva e impecable traducción realizada por Francisco Socas, traspasa, rotunda, épocas y siglos: «Todas las cosas venideras quedan en la incertidumbre: vive de inmediato». Tamaño: 266 Kb, Filosofía, Sistemas Filosóficos, Greco-Romano
Séneca es un filósofo romano contemporáneo a Jesús. En esta obra en particular, se detiene a reflexionar por qué `suceden ciertas desgracias a los hombres buenos siendo así que hay una providencia`. Es decir, ¿por qué Dios o los dioses permiten que cosas malas sucedan a personas que no han obrado de forma tal que las merezcan? La respuesta es simple: para fortalecer el alma, el carácter, el espíritu y, por qué no, el cuerpo. No se trata de una filosofía cristiana, ya que no era difundida como tal, sino de una postura bastante positivista frente a las virtudes del hombre y lo sabía de la providencia. Lo que Séneca plantea es que si una persona no pudiera sobrellevar determinada desgracia, a esa persona no le sucederían estas cosas. Pero si el objetivo divino es que esa persona sea más fuerte y con valores mejor moldeados, entonces debe fortalecerse venciendo las desavenencias. Tamaño: 143 Kb, Filosofía, Sistemas Filosóficos, Greco-Romano
Séneca sentenció: la ira es para el alma un instrumento tan inútil como el soldado que no obedece a la señal de retirada. Como haría Ovidio en Ars Amandi, Séneca describió las señales externas de esta «locura breve» y nos adelantó que se propende a ella cuando el espíritu está debilitado. Nos dijo que la fuerza del hombre se halla en la razón —esto lo supieron más tarde Diderot y Voltaire— y que la humanidad se rige por leyes naturales, pero no por las leyes mecánicas que La Mettrie recalcó en Anti-Séneca. El filósofo pensó que la humanidad se realiza cuando hay apoyo mutuo, y nueve siglos más tarde Kropotkin coincidiría con él en este cimiento de su teoría del progreso. Tamaño: 126 Kb, Filosofía, Sistemas Filosóficos, Greco-Romano
Lucio Anneo SÉNECA - De la tranquilidad de ánimo. Estoy poseído de una grande amor a la templanza, así lo confieso. Agrádame la cama no adornada con ambición, no me agrada la vestidura sacada del cofre y prensada con mil tormentos que la fuercen a hacer diferentes visos, sino la casera y común, en que ni hubo cuidado de guardarla ni le ha de haber en ponerla. Agrádame el manjar que no costó desvelo a mis criados, ni causó admiración a los convidados, y no me agrada el prevenido de muchos días, ni el que pasó por muchas manos, sino el ordinario y fácil de hallar, sin que en mi mesa se ponga cosa alguna de las que el precio subido atrae, sino las que en cualquier lugar se hallan, sin ser molestas a la hacienda y al cuerpo, y sin que sean tales y tantas que hayan de salir por la parte por donde entraron. Agrádanme el criado poco culto y el tosco esclavo, y la pesada plata de mi rústico padre, sin que en ella haya considerable hechura y sin que esté grabado el nombre del artífice. Tamaño: 149 Kb, Filosofía, Sistemas Filosóficos, Greco-Romano
Los Diálogos de Séneca, recopilados como Dialogorum Libri XII, es el nombre genérico que engloba varias de sus obras escritas entre los años 37 y 62, pertenecientes, como indican sus nombres, al género literario del diálogo y conservadas en un manuscrito de la Biblioteca Ambrosiana. Se trata de unos textos filosóficos en los que predominan los temas morales y que, a pesar de su título, no presentan una forma dialogada. En ellos Séneca muestra con espíritu realista su doctrina sobre las pasiones, el amor a uno mismo y a los demás, y la autosuficiencia espiritual. Si se exceptúa el conocido con el nombre de `Sobre la ira`, son relativamente cortos. http://es.wikipedia.org/wiki/Diálogos_(Séneca) Tamaño: 7.665 Kb, Literatura, Clásica
La obra de Séneca ha quedado consagrada como el más amplio e ilustre corpus de filosofía estoica. Dentro de tal corpus ocupan un lugar de privilegio las 124 cartas que el filósofo dirigió a su amigo Lucilio y que son algo más que un epistolario privado. En efecto, pertenecen por excelencia a un género literario consagrado ya en la propia Grecia -Platón, Epicuro, etc.- como uno de los vehículos capitales de la exposición filosófica, al lado del diálogo y de la diatriba, y por ello trascienden del estrecho marco de la correspondencia personal, no solo se dirigen a su destinatario formal, ni se quedan en la temática contingente propia de las cartas en sentido estricto, sino que están pensadas y escritas para su difusión en amplios círculos interesados por las cuestiones generales que abordan. El contenido de la colección es predominantemente ético. Séneca se nos muestra en ella como el gran psychagogós -el «conductor de almas» o «director espiritual»- que pretende ser, como buen sabio estoico. Al propio tiempo, y dado que muchas de ellas toman pie en acontecimientos de la vida cotidiana, las epístolas son un precioso documento para el estudio de las costumbres y mentalidades de la alta sociedad romana de mediados del siglo I. Tamaño: 14.738 Kb, Literatura, Clásica
La obra de Séneca ha quedado consagrada como el más amplio e ilustre corpus de filosofía estoica. Dentro de tal corpus ocupan un lugar de privilegio las 124 cartas que el filósofo dirigió a su amigo Lucilio y que son algo más que un epistolario privado. En efecto, pertenecen por excelencia a un género literario consagrado ya en la propia Grecia -Platón, Epicuro, etc.- como uno de los vehículos capitales de la exposición filosófica, al lado del diálogo y de la diatriba, y por ello trascienden del estrecho marco de la correspondencia personal, no solo se dirigen a su destinatario formal, ni se quedan en la temática contingente propia de las cartas en sentido estricto, sino que están pensadas y escritas para su difusión en amplios círculos interesados por las cuestiones generales que abordan. El contenido de la colección es predominantemente ético. Séneca se nos muestra en ella como el gran psychagogós -el «conductor de almas» o «director espiritual»- que pretende ser, como buen sabio estoico. Al propio tiempo, y dado que muchas de ellas toman pie en acontecimientos de la vida cotidiana, las epístolas son un precioso documento para el estudio de las costumbres y mentalidades de la alta sociedad romana de mediados del siglo I. Tamaño: 17.297 Kb, Literatura, Clásica
Lucio Anneo SÉNECA - Fedra (Bilingüe) Los personajes de la mitología recorren la cultura occidental, desde la Antigüedad hasta nuestros días, y sus historias se cuentan una y otra vez sin decir lo mismo. El apasionado amor de Fedra por su hijastro Hipólito ha sido motivo de especial interés por la densidad de conflictos que presenta, interpretados, según las épocas, como encrucijada de la razón, como predestinación o como drama existencial. La versión de Séneca, con antecedentes griegos y romanos, configura un modelo de situaciones que es la matriz del teatro posterior: ubica al personaje Fedra en el centro del conflicto, en ella se representa la debilidad de la razón frente al amor que arrebata y ciega, la responsabilidad frente al destino, la pasión transformada en desdén y venganza, el arrepentimiento y el sacrificio purificador. Junto a ella se despliegan las tragedias de Hipólito, hijo de una amazona, y de Teseo, esposo aventurero. El joven sufrirá el demoledor peso de una pasión que él abomina y de la que huye, Teseo sufrirá el castigo por la desenfrenada y voraz ira que lleva a la catástrofe. La obra es un modelo de penetración psicológica, una puesta en acto de la dramática condición humana surcada de paradojas, un estudio del ser humano en la sociedad y en el Estado, y, ante todo, una magnífica obra de arte. Tamaño: 551 Kb, Teatro, Grecia - Roma
El pensamiento de Lucio Anneo Séneca (4 a. C. - 65), el máximo representante del estoicismo romano, invita a sobrellevar la vida sin temor. Séneca sostuvo que una vida lograda es aquella que se asienta sobre la razón iluminada por la verdad, que es, indefectiblemente, una vida tranquila, estable, libre, pacífica y magnánima. Mantuvo que los males sólo lo son para la persona que no puede sobrellevarlos bien, y que el hombre bueno se curte sufriendo lo que para otros sería un mal, se entrena venciendo las adversidades y se perfecciona subyugándolas, preparando su espíritu en recio combate con ellas. Un hombre así sabe ofrecerse al destino. Las heridas del alma, y más aun las que un alma brinda a ser nuevamente desgarradas, son la prueba de su valor. Tamaño: 2.041 Kb, Filosofía, Sistemas Filosóficos, Greco-Romano
Dedicado a un Nerón que iniciaba su andadura al frente del Imperio romano, SOBRE LA CLEMENCIA quiere ser una guía para el comportamiento del gobernante y es en este sentido un claro antecedente del género llamado espejo de príncipes, que tan buena fortuna alcanzaría en siglos posteriores. En este tratado -traducido, prologado y anotado por Carmen Codoñer-, SÉNECA, desde sus postulados de pensador estoico atento a los posibles excesos del poder, analiza lo que deben ser los resortes de éste y, poniendo como modelo de gobernante a la figura del sabio, aconseja al soberano que, lejos de ejercer este poder con brutalidad, alcance el respeto de sus súbditos aplicando la moderación en el ejercicio del mismo. Tamaño: 541 Kb, Filosofía, Sistemas Filosóficos, Greco-Romano
Lucio Anneo SÉNECA - Sobre la felicidad. Las obras filosóficas de Lucio Anneo SÉNECA (ca. 4 a.C.-65 d.C.) han ejercido un duradero influjo sobre la cultura occidental y contienen una formulación significativa de las ideas del estoicismo maduro. SOBRE LA FELICIDAD -«De vita beata»- plantea algunas cuestiones centrales de la ética antigua: la relación del placer con la virtud y con la felicidad, el ideal humano, la figura del sabio, la significación del concepto de naturaleza aplicado al hombre, la justificación de las riquezas, los supuestos religiosos de la ética, etc. El tratado está traducido y anotado por Julián Marías, quien en su largo prólogo -titulado «Introducción a la filosofía estoica»- expone la historia y contenido de esta doctrina desde Zenón a Marco Aurelio. Tamaño: 77 Kb, Filosofía, Sistemas Filosóficos, Greco-Romano
Las obras que nos quedan de Séneca se pueden dividir en cuatro apartados: los diálogos morales, las cartas, las tragédias y los epigramas. La filosofía de Séneca se diluye en estas obras. No escribió una obra sistemática de filosofía, su pensamiento filosófico, sus ideas estoicas, se expresan a lo largo de toda su obra y llenan el comentario de todas las situaciones. En el año 41 Seneca es exiliado a Córcega acusado de adulterio con Julia Livilla, y allí estuvo hasta el año 49, cuando por influencia de Agripina se le llama a Roma y se le nombra pretor. Fue durante su exilio que escribió el tratado Sobre la providencia, dedicado a Lucilio Hijo. Tamaño: 184 Kb, Filosofía, Sistemas Filosóficos, Greco-Romano
Se recogen en este volumen cuatro de las piezas teatrales de Séneca el Joven (4 a.C.-65 d.C.), todas ellas de raíz euripidea: -Hércules loco-, -Las troyanas-, -Medea- y -Fedra-. Famoso sobre todo por sus obras éticas o morales, la producción dramática de Séneca explota, frente a sus antecedentes griegos, el realismo horripilante y el debate interior de sus personajes principales, de modo que estos se hacen memorables. Dotadas de gran tensión dramática, por sus tragedias desfilan, además, los eternos problemas y debates que acompañan a la existencia humana, como el mal y sus terribles consecuencias, las pasiones sin control, la inocencia o culpabilidad de nuestros actos, la tiranía del poder, la incontrolable locura de amor, o la posibilidad de la muerte como liberación o supremo acto de libertad. Traducción e introducción de Miryam Librán Moreno y Antonio Ramírez de Verger Tamaño: 4.249 Kb, Teatro, Grecia - Roma
`Las troyanas` es una tragedia de Séneca que escenifica el último día de la destrucción de Troya plasmando el sufrimiento de las mujeres que viven en ella y que se convierten en el botín de los vencedores. La obra incluye una emotiva confrontación entre Andrómaca y Ulises. Tamaño: 4.038 Kb, Teatro, Grecia - Roma
`Las fenicias` de Séneca son, más que una tragedia, dos pequeñas obras que nos han llegado de una forma muy fragmentada y cuya única relación es la de tratar el tema de la familia de Edipo. En la primera, se recoge un diálogo entre Edipo y Antígona en el que él dice querer huir para morir en la montaña y en el que ella se presta a acompañarle a donde vaya. En la segunda, Yocasta, madre y esposa de Edipo a la vez, intenta mediar entre sus hijos Polinices y Eteocles para que no se maten el uno al otro y condenen, al mismo tiempo, a su propia ciudad a vivir una guerra por el trono. El conflicto empezó cuando, tras el primer año de gobierno de Eteocles, éste no quiso cederle el turno a Polinices, de modo que, ninguneado, Polinices se casó con la hija del rey de Argos y reunió su ejército para atacar Tebas y arrebatarle el poder a Eteocles por la fuerza. Tamaño: 3.487 Kb, Teatro, Grecia - Roma
El teatro romano le debe a Séneca (h. 4 a. C.-65 d. C.) casi todo su prestigio actual en cuanto al género trágico se refiere, puesto que sus grandes tragedias se erigen como las únicas muestras íntegras que han pervivido. Y esa reputación y popularidad de Séneca como dramaturgo tienen en Medea uno de sus principales baluart es. En esta obra, el escritor cordobés recupera el mito de Medea y Jasón, del que le interesa sobre todo la figura central femenina que, víctima de las circunstancias y de la actitud de su esposo, se deja llevar por la desesperación. La historia de Medea comienza con el matrimonio en Corinto, donde se han refugiado tras matar a Pelias. Allí Jasón abandona a su mujer para casarse con Creúsa, hija del rey de Corinto. Medea intenta recuperar a Jasón pero, despechada por su rechazo y cegada por la ira, planifica su terrible y cruel venganza. Séneca acentúa en este drama los aspectos más pasionales de la historia para que las decisiones de Medea destaquen especialmente en su dimensión más trágica. «Medea es una pieza clave dentro del teatro de Séneca. Aquí el conflicto entre dos individuos, o mejor, entre dos actitudes individuales, la infidelidad de Jasón y los celos de Medea, se emplea para ejemplificar las funestas consecuencias de una pasión desenfrenada. Y es a la vez esta situación de donde surge el conflicto trágico». Tamaño: 4.187 Kb, Teatro, Grecia - Roma
Gran parte del prestigio del teatro romano descansa sobre los hombros de Séneca, cuya tragedia Fedra se encuentra entre sus logros más notables. El dramaturgo y filósofo de origen cordobés desarrolló en esta obra un tema mitológico ya abordado por Eurípides y Sófocles, y que influiría más tarde en otros autores como Racine. Fedra, enamorada de su hijastro Hipólito, desoye lo que le dicta la razón y, cegada por la pasión, le confiesa su amor. Despechada ante el rechazo de Hipólito, Fedra vuelve a dejarse llevar por un arrebato y calumnia en público a su hijastro. Séneca nos regala en esta tragedia uno de los personajes femeninos más atractivos del teatro de la Antigüedad. Fedra es una mujer independiente, fuerte y decidida que, a pesar de sus virtudes, acaba siendo víctima de su irrefrenable pasión, demostrando poseer una personalidad tremendamente humana. «El carácter de Séneca, aunque como filósofo dominaba sus afectos, no era otra cosa que pasión libre o contenida. Quizá también arrastrado por el estímulo de su naturaleza siempre enfermiza, fomentó en sí mismo un pathos social, que sorprende por su verdad e intimismo. Los sufrimientos fatales del ser humano y la sublimación del ser humano por el dolor constituyen la esencia del pathos trágico. Séneca ha contribuido grandemente con su clara percepción de la dignidad del ser humano, por el mero hecho de serlo, al carácter de este pathos». Tamaño: 2.083 Kb, Teatro, Grecia - Roma
El `Edipo` de Séneca es considerado como uno de los principales modelos de tragedia clásica, si bien ésta no se escribió para representarse en un teatro sino para ser recitada en reuniones privadas. La obra empieza con un temeroso Edipo lamentando la plaga que asola Tebas, la ciudad de la que es rey. Para averiguar cómo librarse de ella, se consulta al Oráculo de Delfos y éste responde que deberá vengarse la muerte del rey Layo, el anterior mandatario de Tebas, si bien primero deberán descubrir al autor de semejante crimen. Tamaño: 1.656 Kb, Teatro, Grecia - Roma
`Agamenón` es una tragedia donde éste, siendo rey de Micenas, regresa de la Guerra de Troya para encontrar la muerte, pues su esposa Clitemnestra ha planeado matarle por haber sacrificado a su hija Ifigenia, instigada por su amante Egisto, un primo de Agamenón cuya rama de la familia fue desheredada y que anhela acceder al trono. Tamaño: 1.664 Kb, Teatro, Grecia - Roma
`Tiestes` es una tragedia en la que Atreo, su hermano, le ofrece un siniestro banquete sirviéndoles a sus propios hijos en venganza por haber cometido adulterio con su esposa Aérope y por haberle hecho robar a ésta el cordero de oro de sus establos, símbolo de realeza. Pero Séneca presenta a Tiestes con simpatía y compasión, pues se arrepiente de las muchas faltas y deslealtades para con su hermano y aspira al perdón de éste y a una vida tranquila. Tamaño: 1.745 Kb, Teatro, Grecia - Roma
`Hércules en el Eta` es una tragedia que habla del escenario de la muerte de Hércules: el Monte Eta. Ahí, éste se construyó un lecho de madera con árboles, dándole su arco y sus flechas a Peante antes de colocarse sobre la pira con la cabeza apoyada en su garrote y con su piel de león extendida sobre él, ordenando a Filoctetes que usara la antorcha para prender los troncos. Tamaño: 2.437 Kb, Teatro, Grecia - Roma
`Octavia` es una tragedia cuya trama tiene lugar al comienzo del reinado de Nerón, cuando éste repudia a su esposa Octavia para poderse casar con la ambiciosa Popea, de quien está enamorado. Pero el pueblo, indignado, se subleva a favor de Octavia, y Nerón, loco de ira, amenaza con incendiar la ciudad y exige la cabeza de su antigua mujer, acusándola de haber azuzado a las masas en su contra. La obra termina con una larga queja de Octavia junto a los lamentos de sus partidarios mientras ésta es llevada al exilio con la orden de acabar con su vida. Tamaño: 1.762 Kb, Teatro, Grecia - Roma
Lucio Anneo SÉNECA - Tratados morales. Los Tratados morales son pequeñas obras, que no son propiamente diálogos, sino ensayos sobre problemas de moral. Los temas tratados en ellos son muy variados, desde cómo debe ser la clemencia de los gobernantes, hasta cómo debe el sabio aprovechar su tiempo de ocio, los títulos de dichos diálogos son: De providentia, de constantia sapientis, de ira, de uita beata, de otio, de tanquillitate animi, de breuitate uitae, de beneficiis, de clementia. También se incluyen las Cartas a Lucilio (124 cartas distribuidas en diez libros, que si bien tienen un destinatario al que Séneca alude en todas ellas, van destinadas a un público más amplio. Constituyen un verdadero tratado de dirección espiritual) Tamaño: 168 Kb, Filosofía, Sistemas Filosóficos, Greco-Romano

 

BIOGRAFÍA:

Lucio Anneo Séneca, llamado Séneca el Joven (Cordoba, 4 a.C. ` Roma, 65 d.C.) fue un filósofo, político, orador y escritor romano conocido por sus obras de carácter moralista. Hijo del orador Marco Anneo Séneca, fue Cuestor, Pretor y senador del Imperio Romano durante los gobiernos de Tiberio, Calígula, Claudio y Nerón, además de ministro, tutor y consejero del emperador Nerón. Séneca destacó como pensador e intelectual, pero también como político. Consumado orador, fue tanto una figura predominante de la política romana durante la era imperial como uno de los senadores más admirados, influyentes y respetados, y fue foco de múltiples enemistades y benefactores a causa de este extraordinario prestigio. Séneca pasó a la historia como el máximo representante del estoicismo y moralismo romano durante la plena decadencia de la república, cuando la sociedad romana había perdido los valores de sus antepasados y se trastornó al buscar el placer en lo material y mundano, dando lugar a una sociedad turbulenta, amoral y antiética que, al final, la condujo a su propia destrucción.